miércoles, 13 de mayo de 2015

Reencuentro

Esta mañana recibí tu visita
y a pesar de haberme atormentado
fue placentero ver nuevamente tus ojos.

Un silencio enorme nos saludo
nos acompaño un momento
dejando que nos pusiéramos al día,
miles de palabras quedaron atoradas en mi garganta
y un mar de lagrimas se seco en mis ojos.

Tu mirada me atravesó la piel
y quede desnudo,
esperando una palabra
tratando de entender tu voz
de comprender,
porque había pasado tanto tiempo
y ahora estabas aquí.
¿Qué es lo que quieres?